no importa cuanto daño te hayan hecho, si diste lo mejor de ti, si diste amor honestamente y estuviste ahí cuando te necesitaron, no importa nada más que eso, tu corazón sabe perdonar pues nunca deja de amar, y se regocija en la felicidad de saber que quien hizo daño por más que haya sido la causa de tus lagrimas, es feliz. Por que al final así es como deben ser las cosas, no importa que no seas feliz conmigo, si eres feliz es suficiente para mí, para comprender que mi momento fue cumplido.