alguna vez has sentido que el frío se cuela por tus huesos de una manera tan brutal que lo único que puedes hacer es intentar no temblar? y que no importa cuánta ropa tengas encima, cuantas capas, cuanto alcohol, todo lo que invade es un frío tan intenso que lo sientes hasta en los dientes.
yo no se en que momento dejé entrar el frío, no se en que momento dejé de encender las llamitas que hacen todo mas lindo, no se en que momento deje de ver el alma que tenía a mi lado, ahora ya es demasiado tarde.
el rencor carcome por dentro los huesos, el alma la consume y apaga toda posible fuente de luz, nunca he sido rencorosa pero tampoco soy humilde y a estas alturas ya no se que es peor.
una vez pensé que ahora ya sólo quedaba seguir para arriba, ahora me doy cuenta que entre más arriba iba más profunda nos sepultaba.