Usualmente tomar decisiones «importantes» nos da miedo, y es super raro o al menos yo no lo entiendo, porqué te da miedo tomar una decisión que es importante? no hay lógica alguna. Si esto es así entonces las decisiones que sabes que son importantes pero no te dan miedo, no son realmente importantes?
Creo que pasamos tanto tiempo buscando situaciones ideales, ideales porque las creamos en nuestra cabeza, un concepto a veces retorcido del como deben ser las cosas y entonces todo lo que no entra en ese parámetro es ¡oh, UNA LOCURA! Pues esas locuras suelen traer más satisfacciones que los planes planeados, ja!
Y claro porque la simple satisfacción de hacer lo no supuesto nos representa un triunfo personal, la verdad es que cuando no nos dan miedo dudamos es de eso, dudamos del no tener miedo y eso es lo peor porque lleva a afrontar cualquiera de dos posibles opciones:
a. ser excesivamente positivos al nivel del idealismo que nos llevan a tener en tal alta estima a determinada situación que cuando la realidad llega y es realidad nos pega en negativo.
b. ser tan negativos que pensamos que es una «mala corazonada» el hecho de no sentir miedo en una situación en la que usualmente LA MAYORÍA de las personas se muestran temerosas y/o inseguras entonces cuando llega la realidad, cuya mejor característica es ser real, estamos tan fijados en encontrar el punto negativo que no disfrutamos lo que vivimos.
la realidad es que sea como sea debemos estar seguros de las decisiones que tomamos y especialmente cuando no nos dan miedo, seguir nuestro corazón, nuestra alma, a nuestro animal espiritual indígena si quieres, a lo que tienes bien adentro que te dice ok, ve por tus sueños, por lo que querías, por lo que deseaste, no va a ser fácil pero va a ser cierto.
Es lo que me decía Astrid, a veces idealizamos tanto lo que queremos que cuando llega algo bueno nos enfocamos en notar que no es lo que «esperábamos» sin procesar que es bueno, igual o mejor de lo que pensamos, pero bueno.
hay decisiones que se toman con el alma, que no se piensan, no se dudan, no se consultan, se toman porque se sienten porque sabemos que es lo que hay que hacer para seguir en el camino que es la felicidad.
a disfrutar tomar aquellas decisiones que no nos dan miedo porque sabemos que nuestro corazón sólo nos lleva a lugares en donde podrá latir al mejor ritmo.