Haciendo mercadito

Una de las cosas que más me gusta de Argentina es la separación de rubros, a ver, en Panamá en un supermercado compras todo, pero es porque casi no te queda opción, algunas ferias de productores, y algunas fruterías, pero no es lo más común, las 3 o 4 cadenas de supermercado que hay se llevan el grueso de los consumidores, lo más seguro la mayoría de la gente alegue comodidad, pero la verdad es que no hay una educación de consumo.

Acá también hay supermercados, y ofrecen de todo pero la oferta de rubros independientes y separados es mucho mayor, y honestamente me parece una delicia, además de que se beneficia el comercio justo pues muchas veces compras directamente del productor o por lo menos estás beneficiando a una cadena de micro empresarios, desde el productor hasta el dueño de la fiambrería (quesos, jamones=fiambres).

Mis amigos me llevaron a una feria en donde los productores entregan el producto al consumidor, hay también puestos de revendedores pero bueno, es un micro empresario al que favoreces, es genial y es una delicia hacer mercadito de esa manera.

«hola, me da 100g de jamón cocido, 200g de queso cheddar, 150 de pastrami…» y así, mientras esperas en la fiambrería a que te atiendan observas a los argentinos y ves que piden, le preguntas a las doñitas que es cada cosa y como se come, es una experiencia placentera, ir al supermercado implica unirte a un mar de gente que necesita salir rápido.

«hola, ¿ a cómo está el kilo de nalga?…¿y el cuadril?, ¿y las costillitas?…¿milanesas de pollo tienes?» en la carnicería el carnicero hace que las carnes parezcan mantequilla cuando las corta, es impresiionante la precisión al hacer los cortes y atinar en el peso que le estás pidiendo, a ellos le pides consejos sobre los mejores cortes para diferentes usos.

En todo este recorrido nunca falta el que se interesa por ti «y de donde son chicas?,» «ah, Panamá, que lindo debe ser, se la pasan en la playa ustedes? y hace mucho calor? que rico debe ser trabajar cerca del mar cálido», obvio nunca falta el pedante que hace referencia a «ah, son colonia shanki ustedes» pero a esos «pelotudos» no les hago caso.

En un recorrido normal, luego de la carnicería vamos al lado, a la verdulería, TODOS LOS VEGETALES PARECEN SACADOS DE UNA REVISTA los tomates brillan, las berenjenas son todas perfectas del tamaño que deben ser, las lechugas de todos tipos, acelgas, rúcula, espinacas y demás verdes te hacen sentir en la montaña, y como usualmente son peruanos es normal encontrar plátano verde, entonces viene la pregunta por parte de algún argentino en la fila «nena, me podés contar como se come eso?» «ah, pero es una banana, es dulce»…luego de la explicación de que no es una banana y que lo comemos salado la mayoría de las veces, les explicamos como hacer patacones, me ha pasado que alguna vez las señoras llevan uno para probar, me gustaría saber cual fue el resultado.

En argentina, lo mejor es la comida, muchos estarán en desacuerdo, pero yo como conocedora del tema lo aseguro, las carnes son deliciosamente perfectas, los vegetales frescos, los lácteos como deben ser, lo que más me ha costado encontrar es pan que sea de mi agrado, pero ahí vamos, ya me contaron de una panadería peruana que está super buena, y es que con este clima y con mi nueva conformada tribu colombo panameña, pues nos reunimos a comer rico, darnos calor y hablar de todo un poco.